El Centro de Humanización de la Salud San Camilo colabora en la promoción del bienestar y el respeto a la dignidad de los religiosos mayores. Para ello desarrolla programas de formación dirigido a diversas congregaciones religiosas, enfocados al envejecimiento en la vida consagrada.
Un buen ejemplo es el curso que esta semana tiene lugar en la sede de los religiosos maristas en Roma. Un grupo de 19 superiores de casas de hermanos mayores, llegados de diversos países como Malawi, Costa Rica, Colombia, Guatemala, EE.UU., Francia, España o Brasil, en el marco de una formación que se desarrollará a lo largo del mes de noviembre.
Encuentros en los que se abordan temas relacionados con el cuidado integral de los religiosos mayores, la atención al cuidador, el acompañamiento en el final de la vida y el desarrollo de actitudes esenciales para un acompañamiento efectivo. “Una formación que contribuye a fortalecer la calidad de vida de quienes han dedicado su existencia al servicio a los demás”, explica Pedro Jesús Arenas, docente del Centro San Camilo que también ha impartido otros programas a Marista en Italia y España.
PROCESOS DE ACOMPAÑAMIENTO A CONGREGACIONES
Para el Centro de Humanización de la Salud San Camilo es muy importante esta iniciativa. Así como los numerosos procesos de acompañamiento que va haciendo entre esta y otras congregaciones, donde se abordan distintos ámbitos:
El cuidado integral de los religiosos mayores: que enfatiza la importancia de un cuidado holístico que abarca aspectos físicos, emocionales, sociales y espirituales; y se presentan estrategias para mantener la calidad de vida de los religiosos mayores y promover su bienestar general.
La atención al cuidador: que destaca la importancia de cuidar a quienes cuidan, proporcionando herramientas para reducir el estrés y prevenir el agotamiento entre los cuidadores de religiosos mayores.
El acompañamiento en el final de vida: donde se brindan pautas y recursos para acompañar de manera compasiva a los religiosos en la etapa final de sus vidas atendiendo a sus necesidades con una planificación anticipada de los cuidados.
Las herramientas conductuales en la demencia: para la atención a religiosos con demencia, proporcionando estrategias y técnicas para manejar los desafíos que esta condición puede presentar.
Las actitudes para el acompañamiento: que incluyen la escucha activa, la empatía, la confrontación y la persuasión, entre otras habilidades cruciales para la alianza terapéutica y el apoyo a los religiosos mayores en su envejecimiento.